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Por un año adicional, el campo Pokche experimentará una extensión de su Programa de Transición, gracias a una inversión suplementaria de 30.33 millones de dólares realizada por Petróleos Mexicanos (PEMEX).
Ante la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH), la petrolera mexicana formalizó su solicitud para dar continuidad al último período de producción temprana de hidrocarburos de los pozos Chejekbal-1EXP, Pokche-2DES, Pokche-12DES, Pokche-15DES y Pokche-22DES.
PEMEX, con la aprobación de su solicitud, tiene como objetivo lograr una producción máxima de 29 mil barriles diarios de aceite y 52 millones de pies cúbicos de gas mediante la modificación del Programa de Transición. Durante la vigencia de dicho programa, se espera alcanzar un volumen acumulado de 8.53 millones de barriles de aceite y 15.35 mil millones de pies cúbicos de gas.
La asignación AE-0151-M-UCHUKIL cuenta con el campo Pokche, ubicado a 28 kilómetros de la Terminal Marítima Dos Bocas, en el Golfo de México. Con una extensión de 33,17 kilómetros cuadrados, este enclave resguarda dos yacimientos: uno de edad del Jurásico Superior Kimmeridgiano (JSK) y el otro del Cretácico, identificados mediante los pozos exploratorios Pokche-1 y Chejekbal-1EXP.
Cuando se dio inicio a la estrategia temprana en la administración actual de PEMEX, uno de los campos prioritarios fue este, como se evidenció con la aprobación en 2022 del Programa de Transición. Se proyectó inicialmente una inversión de 206 millones de dólares, cantidad que se incrementó debido a ajustes solicitados.
PEMEX introdujo la técnica de producción durante la perforación en el campo Pokche, un campo emblemático de aceite de 42 grados API. La eficiencia se maximiza mediante una plataforma auto elevable que gestiona simultáneamente cuatro pozos, al marcar un logro para la empresa productiva del Estado.
La petrolera mexicana logró sus metas gracias a la estratégica incorporación de nuevos campos a su proceso productivo. En el transcurso de cinco años, se desarrollaron más de 40 proyectos, al contribuir con más de 580 mil barriles diarios, lo que representa alrededor de una tercera parte de la producción total. Esta táctica fue esencial para contrarrestar el declive de los campos maduros y aumentar la producción global de hidrocarburos.
